sábado, 2 de enero de 2016

Mi exhortación para el Año Nuevo


Por Luis Alberto Tejeda
Quiero aprovechar las últimas horas de este mes de diciembre para dejar constancia de mi gratitud, primero a Dios, el Todo Poderoso, por permitirme la gracia de aceptar, junto a mi familia, colaboradores y amigos, su sagrada voluntad, manifestada en cada uno de los acontecimientos de este año 2015 que finaliza en las próximas horas.

Asimismo quiero aprovechar la ocasión para expresar mi más sincero agradecimiento a cada una de las personas que decidieron favorecerme, convirtiéndome en el precandidato a diputado más votado de mi circunscripción y del municipio.


Asumo cada sufragio con humildad.

Como un reforzamiento del compromiso con las propuestas y los valores que presentamos en nuestra campaña y que en estas palabras de fin de años reafirmamos con toda la solemnidad y la seriedad que nos caracterizan.
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En ese sentido les invito a que pongamos en manos de Dios este año 2016, para que él guie nuestros pasos, nuestros pensamientos y nuestras acciones.

También agradezco a nuestros colaboradores sus consejos, trabajos y sacrificios, pues sin sus aportes no hubiera sido posible lograr nuestros objetivos.

Por todo esto reitero mi intención de seguir practicando la solidaridad como uno de los puntos cardinales de nuestro accionar.

En esa misma tesitura me comprometo a continuar aportando soluciones concretas a los problemas que afectan a nuestras comunidades.

Y por supuesto, en todas nuestras actuaciones nos mantendremos apegados a la gran lección de la Navidad que nos da el mismo Dios, el creador del universo, que decide nacer en un pesebre para mostrarnos que las fuerzas más poderosas del universo son la humildad y el amor.

Finalmente, les deseo de todo corazón que con el Año Nuevo Dios nazca en cada uno de nosotros y que nos ayude a sanar nuestras heridas, superar nuestras dificultades y nos colme de la verdadera paz, felicidad y la prosperidad que solo él provee.

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